Más cerveza.. para la cabeza...

El fin de semana tuve la oportunidad de tomar cerveza y como a la tercera, ya que el cuerpo y el cerebro empiezan a hacer efervescencia me puse a pensar en el sabor tan diferente que puede tener una cerveza dependiendo la ocasión, el estado de animo y la compañía con quien la tomes.

¿A poco no?



No es lo mismo tomar cerveza en Carnaval, cuando todo mundo esta contento, con la música, el baile de las comparsas, la batucada y los carros alegóricos, ver a una multitud desenfrenada le da a la cerveza un toque de libertad y de despreocupación a las cosas.

Tomar cerveza con tus amigos, festejando el cumpleaños de alguien o solo por el gusto de convivir le da a la cerveza el sabor de amistad, de cariño, de equipo; sin duda este sabor es el que más me gusta..



Echarte una chela cuando tienes algún mal de amores, una pena, una desilusión, un fracaso profesional o personal adquiere un sabor amargo, frustrante, doloroso…

Ahora que si la cerveza nomás te la tomas porque tienes sed, sin duda te va a saber a cerveza



¿Y que tal cuando la cerveza es la primera en tu vida? Al menos a mi me supo muy fea y también dije “Como pueden tomar esta cosa tan amarga” y miren ahora…

Disfruten el Carnaval del Bicentenario, disfruten los eventos masivos y si toman cerveza con moderación por favor, luego ves cada desfiguro..

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